Presidente del organismo manifestó su "vergüenza" por lo ocurrido. "Tenemos que asegurarnos de que este acto infame en Honduras termine siendo un fracaso", señaló el nicaragüense D´Escoto.
La Asamblea General de la ONU inició una reunión de urgencia para analizar la situación en Honduras después del golpe de Estado que el domingo derrocó al presidente del país, Manuel Zelaya, y discutir posibles medidas para facilitar su regreso al poder.
"Es con el corazón triste e indignado que abro esta sesión plenaria para tratar el golpe de Estado que interrumpió el orden democrático y constitucional del presidente José Manuel Zelaya en la República de Honduras", dijo el presidente de la Asamblea General, el nicaragüense Miguel D´Escoto, al inicio del acto.
El ex canciller sandinista aseguró que convocó la reunión tras recibir numerosas peticiones de países miembros del organismo para que se discutiera en ese foro multilateral "este atroz atentado contra la democracia hondureña".
"Como nicaragüense, me siento avergonzado de que se dé un golpe de Estado en Centroamérica durante mi presidencia de la Asamblea General", apuntó.
Además, pidió a los países actuar "para asegurarnos de que este acto infame en Honduras termina en fracaso absoluto".
D´Escoto señaló que le ha enviado a Zelaya una invitación para que acuda en persona a la Asamblea General a exponer la situación en su país.
"Tenemos que asegurarnos de que este acto infame en Honduras termine siendo un fracaso", agregó.
El embajador hondureño ante la ONU, Jorge Arturo Reyna, agradeció en su intervención la solidaridad de la comunidad internacional con su Gobierno y destacó el rechazo internacional generalizado que ha seguido al arresto y deportación de Zelaya.
"Era una historia que pensábamos terminada, pero de nuevo fuerzas que se oponen a la voluntad popular y la democracia han reaparecido", señaló.
Por su parte, el Buró de Coordinación del Movimiento de Países No Alineados (Mnoal) expresó antes del inicio de la reunión su "más enérgica condena" a la acción de las fuerzas armadas hondureñas.
"Al reafirmar su apego a los principios y propósitos que rigen el Movimiento de Países No Alineados, incluyendo el principio de rechazo al cambio inconstitucional de Gobiernos, el Buró de Coordinación llama a la comunidad internacional a condenar firmemente la acción golpista", dijo el MNOAL en un comunicado divulgado en Nueva York.
Asimismo, expresó su pleno apoyo y solidaridad al pueblo y Gobierno constitucional hondureño, al tiempo que exigió la restitución inmediata de Zelaya.
La crisis política en Honduras se agravó este domingo con la destitución de Zelaya, a quien el Ejército sacó de su casa por la fuerza y lo trasladó a Costa Rica, horas antes del comienzo de una consulta popular que el presidente hondureño había convocado para reformar la Constitución de 1982.
El Parlamento y el Tribunal Supremo de Honduras habían declarado ilegal la convocatoria de la consulta para preguntar a los hondureños si estaban a favor de la celebración de un referendo en noviembre próximo sobre una Asamblea Constituyente.
Zelaya fue sustituido por el presidente del parlamento Roberto Micheletti, de su mismo partido, designado para asumir la presidencia de Honduras durante los seis meses que restan del período de cuatro años para el que Zelaya fue elegido en 2005 y que terminará el 27 de enero de 2010.