La Cámara de Senadores de Bolivia aprobó por unanimidad una declaración de rechazo a las normas anti-inmigración que propone nueva ley del gobierno Berlusconi.
La Cámara de Diputados de Italia aprobó una ley de corte fascista:
“La inmigración y estancia clandestina es un delito a ser reprimido con multa de 5 a 10 mil euros. Se propicia la delación ante la justicia de los inmigrantes en situación irregular, ampliándose de 2 a 6 meses su detención en campos de concentración. Se posibilita la creación de asociaciones de ciudadanos que hagan rondas para denunciar alteración de orden público y la anotación de los sin techo”.
La respuesta boliviana en la Cámara alta no se dejó esperar. El senador A. Peredo propuso una Declaración, la misma que fue aprobada por unanimidad de oficialistas y opositores con el siguiente texto: “La H Cámara de Senadores declara su indignación y rechazo a esta ley mal llamada de inmigración ilegal. Endurece más las ofensivas condiciones de la Directiva de Retorno que aprobó el Parlamento Europeo ratificadas por todos los gobiernos integrantes de la Unión Europea; por que además, crea mecanismos de persecución y violencia indiscriminada contra los inmigrantes que no porten la documentación que se les requiera; aplica multas elevadas a quienes tienen ingresos miserables y los detiene hasta por 6 meses en cárceles a las que llaman “Centros de identificación”, propicia la delación contra los extranjeros que no han podido regularizar su situación y atenta contra los principios elementales de respeto a la persona humana; la rechaza porque además, promueve y posibilita la creación de bandas que se ocupen de buscar inmigrantes ilegales sobre quienes se descargará la xenofobia en toda su intensidad. Por todo ello, exige que la Cancillería de Bolivia tome contacto con los gobiernos de todos los países cuyos nacionales inmigrantes corren el mismo riesgo por la norma que será aplicada a corto plazo en Italia y denuncie, en los foros internacionales, la gravedad de estas normas que comienzan a regir en algunos países de la UE y especialmente en Italia”.
He aquí un tema de bioética política internacional. La bioética no solo trata de la relación médico paciente, del aborto, del consentimiento informado, de la investigación científica, de la ingeniería genética, también trasciende universal las culturas, las etnias, la historia, la sociología, los DDHH y se adentra en terrenos filosóficos, sociológicos, políticos.
A propósito de esta ley inaceptable, reviso el devenir histórico de las experiencias humanas hasta el presente: esclavismo, feudalismo, capitalismo, fascismo, socialismo real, neoliberalismo, imperialismo; los ciclos evolutivos de avance y retroceso donde el hombre puso su empeño egoísta o su altruismo genuino.
Siempre en pos de la felicidad personal y colectiva, en la búsqueda de caminos de la suprema armonía, del socialismo de nuevo cuño que al parecer vislumbramos al inicio en este nuevo Siglo XXI, aquí en el Abya Yala, recogiendo los principios y valores de la ética andina y el neo-humanismo pacifista. Se terminó el individualismo y brilla la nostridad y ya se perfila la nueva Nación Humana Universal; la ansiedad de amor y equilibrio entre los seres humanos y entre ellos y la naturaleza, en el único planeta con atmósfera protectora del milagroso proceso de la vida en evolución dialéctica.
Del amphioxus unicelular al primate ser humano pasando por múltiples etapas embriológicas; la filogenia de millones de años a la ontogenia intrauterina de nueve meses.
En el camino ordenado por el Creador, siempre primó la bestialidad, el instinto y la violencia. La invasión europea al Nuevo Mundo exterminó millones de originarios y se forjó el racismo a ultranza. Incluso, los europeos y norteamericanos llegaron a organizar dos matanzas mundiales que concluyeron con la explosión nuclear en Hiroshima y Nagasaqui. Se creyeron dioses y son divinidades pero del averno en su maldad y en la cultura de la muerte.
Ahora en Italia, a los parlamentarios les renace Mussolini y su alianza hitleriana. Giordano Bruno y Savonarola retornan a la vida para volver a la hoguera y Galileo nuevamente postrado ante el Santo Oficio de la Santa Inquisición atrabiliario y nefasto. Se preparan a apurar crímenes y gestos contra los seres inmigrantes que vuelven los pasos a la Europa colonizadora. No les bastó saquear tantos recursos naturales del continente descubierto, no les fue suficiente esclavizar, traficar, asesinar y martirizar a los indios mitayos y a los negros raptados del África. En galeones robaron la plata, el oro y todos nuestros recursos naturales, hasta el presente.
El historiador y antropólogo Luis Oporto afirma que en el Museo del Hombre de París se encuentra toda la cultura Kallahuaya robada por el europeo Girault. Que el galeón “Nuestra Sra. de las Mercedes” portaba mineral precioso de Potosí a España. Que las misiones científicas fueron de total sustracción a la cabeza de D´Orbigny, Castelnau, Benatti, Hertzog, Heinz Kilm, que transportaron bienes culturales sin permiso alguno. Que EEUU y sus aliados europeos aprovecharon el estaño estratégico obligando a Bolivia a declarar la guerra a Alemania para quedarse con el Buffer Stock, recordemos que su control económico llevó a las masacres mineras de los gobiernos serviles, aquellos que perseguimos infructuosamente. En fin, una historia de robo descarado y de ignominia.
La Cámara de Diputados de Italia deja entrever que el Pithecantropus Erectus dejó semillas en su trayectoria europea. Felizmente, hoy en Bolivia se organiza la Procuraduría para defender al Estado de la delincuencia internacional y mediante el H. Senado, enviamos una bofetada viril y soberana al país y países que se atreven con ideas fascistas renovadas. Hacemos votos porque Rafael, Leonardo, Miguel Ángel, retornen con sus mensajes eternos, que sea posible una nueva bioética en la bella Italia.