El Cuento de la Resolución. 13. Hemry Silvestre. 06-10-2009

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Cuando lo querido se manifiesta en resolución, parece que todo esta al alcance de la mano, porque la idea sueña con su concreción.

Lo resuelto parte de una idea que tiene como techo un acuerdo, se diferencia de la puesta en marcha porque ésta tiene como piso el acuerdo y marcha precisa con un propósito.

Con el puntapié inicial comienza el proceso, resolver es entonces antes de comenzar.

En el transito hacia la acción se pasa por la resolución, pero la sola resolución es un proyecto no llevado a la practica. Una idea.

La resolución difiere en magnitud con la declaración en tanto que la primera es interna y representada, la segunda es externa y conciente de esa representación.
La cual esta mucho más próxima a ser vivida, que una simple resolución.

Así como el proyecto es un ensueño elaborado, la resolución es un anhelo todavía postergado. Apenas roza la vigilia cotidiana. Una cuasi-vigilia.

La resolución ilusiona con la concreción y la concreción ilusiona con el éxito, así el éxito es un nuevo sueño compensatorio.

Resolver todavía es ensoñar activamente, en positivo. Sin embargo el intento es poner en práctica la resolución, exige un estado más alto, más vigílico.

Por tanto el propósito es la coherencia de la continuidad en el registro de las acciones.


SE RELACIONA CON: Los estados de conciencia. Estática y dinámica. La resolución, la experiencia y el planteo. Proceso y dirección de todo proceso. Alegórico y simbólico y Apuntes de psicología.

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Extraido de:
http://www.facebook.com/note.php?note_id=311150855392&id=1589814678&ref=nf