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Externalidad
Te conozco...
Me pones afuera. A la deriva.
Sintiendo el viento que corta mi alma.
Te reconozco y cuando lo hago desatiendo...
Mi cuerpo gira en torno a tus deseos.
Gira alrededor de aquello que es básico. Casi instintivo.
Es así, lo sabemos.
Placer y sufrimiento unidos por el mismo eje.
Dos caras de la misma moneda, que me inquietan y sobresaltan.
Ahora mismo me pasa...
Hago un Intento. Atiendo.
Un poco, solo un poco, sin forzar ...
Comprendo que viene un enfrentamiento.
Pido ayuda, aunque sin mucha fuerza.
El deseo es mayor y también el sufrimiento...
Contradicción soy. Me veo.
Ahí estoy. Frente a frente con lo que tanto conocemos.
La mecánica frente a la intencionalidad.
La lucha eterna.
Aquella primigenia.
No se exactamente que hacer. Sólo observo.
Al observar, algo profundo en mí pide ayuda con mayor Fuerza...
Lo percibido aún se me impone. Sigo observando.
Mi corazón se tensa. Acuso recibo.
Una señal me llega...
! Falla en el circuito! Hay que desatar el nudo.
Miro el computador y allí me lanzo.
Hago lo aprendido.
Escribir lo que pienso, lo que siento, lo que hago...
Allí, compasiva y amorosa, comienzo a comprenderme en profundidad.
La suave paz , la amorosa comprensión profunda se registra como una gran unidad interior. Así me llega.
Hoy he superado mi contradicción.
Veo el recodo del camino...
Allí descanso.
Allí me observo.
Allí agradezco.
Extraido de:
http://www.facebook.com/home.php?#/note.php?note_id=352811570007&id=1241054600&ref=nf