miércoles, 16 de diciembre de 2009
Posible Esquema Para Un Proceso Transferencial. Sasha Volkoff. Versión 1.0, junio 2004.
Interés del material
Elaborar un sencillo esquema, o guía, que permita a cualquier persona del Movimiento, no experta en estos temas, comenzar a trabajar en Operativa. Este material debe, necesariamente, complementarse con otras lecturas (ver Bibliografía), con algunas prácticas del Movimiento (principalmente el Centro de Trabajo para Del. Grales., sobre Operativa) y con el intercambio con otras personas que estén o hayan estado realizando este proceso.
La bibliografía es abundante (mayor que la reseñada al final); sin embargo, quizás no sea fácil encontrar un esquema que nos permita definir los puntos más importantes del proceso, algo así como un "mapa" con el cual movernos y que nos facilite saber cómo comenzar, en dónde estamos en el momento actual y cuáles serían los siguientes pasos.
A quién va dirigido
Este material va dirigido a personas del Movimiento Humanista que conocen con amplitud los temas generales del MH y en particular los temas de trabajo personal, que tienen experiencia en trabajos previos y que han realizado las prácticas de distensión, sicofísica y autoconocimiento del Autoliberación.
Objetivo general de la Operativa
La Operativa (Catarsis y Transferencias) tiene como objetivo la integración de ciertos contenidos que han quedado fijados en nuestra conciencia (por diferentes motivos) y que mantienen retenida una cierta cantidad de energía, produciéndonos contradicción y por lo tanto sufrimiento.
Esta energía, una vez liberada, es la que nos permitirá afrontar nuevas acciones en nuestra vida, orientadas siempre a la superación del dolor y el sufrimiento en uno y en los demás. Este sistema no tiene en ningún caso una función terapéutica.
Si el conflicto al cual nos enfrentamos fuera demasiado grande, no sería una buena idea intentar resolverlo por vía de la Operativa sin consultar antes con un especialista, incluyendo un chequeo médico profundo que descarte malfunciones orgánicas.
Tampoco el interés de la Operativa es ayudar a superar pequeñas dificultades secundarias u ocasionales a las cuales nos enfrentamos en nuestra vida, por cuanto seguramente el esfuerzo invertido en este proceso será desproporcionado con el beneficio que esperamos obtener.
Por otro lado, muchos contenidos o climas que nos generan sufrimiento pueden ser superados efectuando repetidamente prácticas con determinadas Experiencias Guiadas. En estos casos, es más recomendable ésto que el trabajo con Operativa, por cuanto el primero es sencillo, se puede realizar en soledad y está muy focalizado, mientras que el segundo implica mayor estudio y conocimiento de las técnicas, un trabajo en dupla e implica comenzar a tirar de una madeja de la cual irán saliendo distintas puntas, con lo cual en un primer momento, en lugar de converger se diversifica el trabajo.
La Operativa es más recomendable cuando se desea trabajar con aquellos climas profundos, no muy precisos, que nos han acompañado durante mucho tiempo, que de alguna manera implican toda nuestra estructura vital.
Se habla de "integrar contenidos" y no de "superar problemas" por cuanto esto es técnicamente más correcto, ya que lo que se pretende es precisamente abordar aquellos contenidos que han quedado aislados (como islas) en nuestra conciencia, desligados (o desintegrados) respecto del resto de nuestra vida. Tampoco hablamos de problemas en sentido general, por cuanto éstos son en realidad un aliciente para nuestra superación y en ningún caso son la fuente de nuestro sufrimiento, ya que éste es causado por las contradicciones.
Sintetizando, el objetivo de la Operativa es la "normalización de la vigilia", la obtención de una vigilia equilibrada. Cuando hay determinados climas de trasfondo operando en nosotros con cierta permanencia, que no facilitan nuestra actividad en el mundo, decimos que la vigilia está teñida por estos climas que no son propiamente vigílicos.
Forma de operar de las transferencias
El cuerpo emite señales (impulsos) de tensión-distensión. Estas señales son traducidas por la conciencia en imágenes. Así, se van asociando determinadas imágenes a determinadas tensiones o climas; estas tensiones o climas, cuando son negativos, es lo que registramos como sufrimiento. Una vez establecida esta relación, ante una imagen similar a la relacionada, nos surge esa tensión o ese clima. Estas imágenes "asociadas" lo serán por similitud o contigüidad con la imagen grabada en un primer momento.
El problema es que estos climas están fijados a esas imágenes, aun cuando no nos resulte fácil descubrir cuál es esa imagen original que había cuando se formó ese clima. El trabajo de las transferencias es trasladar las cargas negativas asociadas con esas imágenes a otras imágenes contiguas, lo que produce una movilidad en el clima y por lo tanto se va "desfijando". Este solo hecho va disminuyendo la carga que esas imágenes tienen para nosotros, y consecuentemente van desapareciendo los climas asociados.
Las transferencias no operan cambios "mágicamente", sino como consecuencia del trabajo sostenido. Asimismo, estos cambios se producen más durante la elaboración post-transferencial, que durante la transferencia en sí (ver Elaboración post-transferencial más adelante). Es en la discusión vigílica y la elaboración post-transferencial donde el sujeto va estableciendo relaciones y comprendiendo mejor su sistema de traducción de impulsos.
En algunos casos, estos cambios se pueden producir súbitamente, pero en este caso lo que ocurre es un proceso de acumulación en el proceso del sujeto, que en un determinado momento produce un cambio importante. En cualquier caso, es el proceso del sujeto el que va a producir el cambio, no la práctica de las transferencias por sí solas, y éstas pueden dar el último empujón que necesita el sujeto para producir esa transformación.
Indicadores de cambio
Las tensiones y climas que queremos modificar con las transferencias tienen asociadas conductas en el mundo. Es la modificación de estas conductas lo que nos indicará que se ha producido una transferencia. Esos cambios en la conducta afectarán exclusivamente aquellos comportamientos asociados a la tensión o clima transferidos; sin embargo, si estas tensiones o climas fueran básicos y afectaran a toda la estructura del individuo, entonces ese cambio conductual se notará en todos los ámbitos de la vida del sujeto.
Al transferir las cargas de estas tensiones o climas, cambia nuestra perspectiva, nuestras valoraciones, se adquiere mayor comprensión. Entonces se puede ver la etapa anterior sin la carga climática que tenía, como si saliéramos de un sueño.
Superación del sufrimiento
El sufrimiento se supera por comprensión, no por prácticas; en todo caso, determinadas prácticas ayudan en esa tarea. Para arribar a estas comprensiones es necesario estudio y trabajo interno.
En última instancia, la solución del sufrimiento está relacionada con un cambio en la actitud mental; esta actitud mental tiene que ver con el registro de las actividades posesivas o no posesivas frente al mundo y frente a las cosas, con la actitud de posesión o no posesión (ver Libro de Escuela, Consecuencias de los estudios y trabajos de Operativa, al final).
Definición del objetivo
Cuando una persona (de aquí en adelante el sujeto) desea comenzar a trabajar en Operativa, lo primero que debe hacer es definir el objetivo que persigue.
Este objetivo puede ser, básicamente, de dos tipos:
• Si el sujeto tiene claro cuáles son los climas o las situaciones que le causan malestar y que desea trabajar, ese será su objetivo.
• Si el sujeto no tiene claro esos climas o esas situaciones (llamados genéricamente contenidos), el objetivo será, en una primera etapa, la definición de ese contenido.
En última instancia, antes de abordar la segunda etapa el contenido a integrar debe estar claro. Este contenido puede ser un clima o una situación concreta. En algunos casos, este clima puede coincidir con aquello que definimos como clima básico, como núcleo de ensueño, como nudo biográfico, como nudo de dolor o como "esa forma de ser tan característica, que le produce sufrimiento a uno y a quienes lo rodean". Esta última definición, menos precisa que las anteriores, tiene la facilidad de que puede ser "pescada" intuitivamente.
Nota al margen: Los ensueños primarios (no ocasionales) pueden ser variados, pero giran en torno a un eje común que definimos como núcleo de ensueño; por otro lado, estos ensueños son compensatorios de carencias que también giran en torno al eje del clima básico. A veces no tenemos claro si el núcleo de ensueño es lo mismo que el clima básico o bien es la compensación de ese clima básico; si tomamos la segunda definición, de todos modos núcleo de ensueño y clima básico están indisolublemente ligados, y a efectos prácticos podemos considerarlos como equivalentes o como diferentes puntos de vista sobre lo mismo. En muchos materiales estos términos se utilizan casi como sinónimos.
Condiciones previas
Para poder encarar un proceso transferencial, es necesario el manejo de ciertas técnicas, y la pulcritud al tener en cuenta ciertos aspectos:
Rélax
Un buen dominio del rélax es imprescindible, ya que las transferencias se realizan en un estado de semisueño activo. Si hay excesivas tensiones mentales, será difícil bajar a ese nivel de conciencia; si hay tensiones físicas, éstas influirán decisivamente en las imágenes que vayan apareciendo. Por otro lado, si partimos de un buen nivel de rélax físico (interno y externo), podremos identificar tensiones que surjan durante las transferencias, siendo ésto de mucha utilidad para la posterior interpretación.
Experiencias guiadas
Las experiencias guiadas ayudan mucho al sujeto a moverse por su mundo interno con imágenes alegóricas. Además, pueden servir para detectar conflictos importantes. Por último, hay cinco experiencias guiadas particularmente importantes, ya que ayudan a aprender las técnicas utilizadas durante las transferencias: transformismos, expansiones y cambios de nivel.
Estas experiencias son:
• Los disfraces
• El ascenso
• El descenso
• Avances y retrocesos
• El trineo
Síntesis del autoconocimiento
Es imprescindible haber realizado las prácticas del autoconocimiento tal como están en Autoliberación, y haber podido sintetizar los aspectos más importantes.
Condiciones de trabajo
Ámbito de trabajo
El ámbito en que se desarrollan las prácticas debe ser tranquilo, la posibilidad de interferencia de estímulos externos (interrupciones, ruidos, etc.) debe ser mínima.
El sujeto puede trabajar cómodamente sentado o acostado. Se recomienda hacerlo sentado, aunque también se puede hacer acostado. Esto lo deberá decidir el sujeto (ver Libro de Escuela, Teoría de las transferencias).
Guía y Sujeto
El trabajo de Operativa (tanto la catarsis como la transferencia) se realiza en parejas. Estas parejas guía-sujeto deben cumplir ciertos requisitos (ver Libro de Escuela, Teoría de las transferencias):
• Confianza absoluta del sujeto en el guía y viceversa. No vale la confianza en una sola dirección, debe ser mutua. La confianza debe ser tanto en la discreción del guía como en su pericia técnica. El sujeto debe "dejarse llevar" por el guía. Si no se produce esta soltada, será muy difícil que el sujeto pueda bajar al semisueño para realizar un buen trabajo.
• Pericia del guía. El guía debe tener pericia en el manejo de las técnicas transferenciales. En el caso de alguien que se inicia como guía, esta pericia se podrá adquirir con la práctica, pero se debe ser muy cuidadoso en las primeras prácticas, estudiar bien y tener muy en cuenta las recomendaciones.
• Antes de comenzar a trabajar, será bueno que el guía tenga algunos datos biográficos del sujeto, porque serán de ayuda. Sobre todo los aspectos negativos, porque son éstos los que queremos trabajar.
• En algunos casos se puede establecer una dependencia síquica del sujeto con el guía. En esos casos, es conveniente cambiar de guía. Un indicador de dependencia es una ambivalencia afectiva (ciclos de afecto y repulsa).
Catarsis
Antes de encarar las transferencias, se debe realizar las prácticas de catarsis, siguiendo el esquema del Autoliberación. Se realizarán sondeos catárticos, con el objetivo de detectar temas que generan tensión, y posteriormente se realizarán las catarsis necesarias para descargar esas tensiones.
La catarsis es una técnica que puede ser utilizada en cualquier momento del proceso transferencial. Si en un determinado momento, durante el proceso, se detecta un exceso de tensiones, podría ser necesario descargarlas por la vía catártica. Ese exceso de tensiones se puede observar antes de realizar una transferencia (en cuyo caso el sujeto intenta relajarse, pero si siente que esto no es suficiente, podrá realizar una catarsis e inmediatamente no se realizará una transferencia) o bien durante la misma (en este caso, se suspende la transferencia y se continúa con el proceso catártico).
La catarsis, pese a la vistosidad en que puede incurrir, no equivale a una transferencia sino a una descarga provisoria de tensiones. Esta descarga no es más que una redistribución de cargas dentro del mismo sistema, que más tarde o más temprano volverán a aflorar si no se transfieren (ver Libro de Escuela, Teoría de las transferencias, al comienzo). Por otro lado, la manifestación catártica durante una transferencia será considerada como una resistencia.
Primera etapa - sondeos transferenciales
En una primera etapa, con posterioridad al trabajo de catarsis, se efectúan prácticas de sondeo transferencial. Los objetivos de estas prácticas son básicamente dos:
• Conocimiento y práctica de la técnica transferencial. Tanto sujeto como guía deben adquirir pericia en el manejo de la técnica, además el sujeto debe aprender a moverse por los distintos planos (alto, medio y bajo), mientras que el guía debe conocer las particularidades del sujeto, para facilitarle posteriormente el guiado de las transferencias.
• Detección de resistencias. Durante los sondeos, el sujeto irá recorriendo los distintos planos y encontrando resistencias en determinados puntos. Estas resistencias serán los indicadores que servirán para detectar aquellas situaciones conflictivas. Si el sujeto ha definido un objetivo preciso del proceso transferencial (un clima o una situación concretos), estos indicadores le permitirán conocer aquellas situaciones donde el clima o las tensiones afloran con mayor intensidad. Si, en cambio, el sujeto no tenía claro el tema a trabajar, el estudio de las resistencias detectadas le facilitará la identificación del mismo.
La duración de esta etapa viene determinada por la definición del tema a trabajar y por la soltura adquirida en las prácticas. No hay ningún apuro en pasar a la siguiente etapa. En general, no es recomendable tener apuro en ningún momento del proceso. Las cosas requieren su tiempo de maduración, e intentar acelerarlas es contraproducente. Por otro lado, tampoco es recomendable una laxitud extrema en los tiempos de trabajo (es decir, no dejar pasar demasiado tiempo entre las prácticas), porque entonces se pierde un poco el hilo conductor y todo el proceso se enlentece innecesariamente, pudiendo incluso producir una sensación de "no avance", que no es recomendable.
Tipos de resistencia
• Dificultad en la representación de imágenes visuales. Si el sujeto no puede representar imágenes visuales, trabajará con el sistema de imágenes que le resulte afín. De todos modos, hay ejercicios que se puede realizar para mejorar este tipo de representación.
• Racionalizaciones vigílicas. El sujeto no suelta el mecanismo de asociación, de alegorización. Es importante que el sujeto haga un buen rélax antes de comenzar, que tenga confianza en el guía y en la técnica, y que "pesque" ese registro de lo asociativo. Sino, estamos ante un caso de imagen vigílica guiada (el sujeto va relatando imágenes pero éstas no se producen por asociación libre, no "aparecen solas", sino que las va poniendo el sujeto de manera más o menos vigílica).
• Ocultamientos, olvidos y bloqueos en general. Se procederá con un sondeo catártico de realimentación y, si no fuera suficiente, con una catarsis profunda.
• Irrupciones de la catarsis. Cuando el sujeto tiene una abreacción catártica que interrumpe el proceso de la transferencia, ésta se suspende y se continúa la catarsis.
• Dificultades en desplazamientos verticales u horizontales, en expansiones y contracciones o en transformismos. Se proporcionan ayudas alegóricas al sujeto, a fin de que éste pueda vencer estas resistencias.
• Dificultades en la adhesión de un clima a imágenes. El sujeto percibe un clima pero no encuentra imágenes que pueda asociar claramente. Buscar estas imágenes hasta que el sujeto experimente un verdadero "encaje" entre la imagen y el clima.
• Dificultades en la disociación (desadhesión) entre una imagen y un clima. El guía sugiere trasladar el clima a otras imágenes y así siguiendo, hasta que las originales pierdan fuerza emotiva (ver Transferencia de climas).
• Desplazamiento excesivo, veloz, de las imágenes. El guía debe pedir al sujeto que vuelva atrás y describa detalladamente la situación en que está, de manera que este no vaya saltando de imagen en imagen sin tiempo para experimentar la situación.
• Rebote de altura o plano. El sujeto está en el plano bajo y súbitamente aparece en el plano alto, o viceversa. En este caso, se retoma el proceso en el plano en que se estaba, y se utilizan ayudas alegóricas cuando se pueda producir el rebote.
• Rebote de nivel. El sujeto pasa a vigilia. En este caso, se suspende la transferencia y se vuelve a empezar.
• Imágenes fijas, obsesivas. El sujeto está en una situación, el guía le propone diferentes salidas pero el sujeto no puede salir. En estos casos hay que insistir hasta encontrar las imágenes alegóricas adecuadas que ayuden al sujeto.
Aspectos orgánicos
Durante las transferencias se trabaja con imágenes alegóricas producidas por el sujeto. Estas alegorías deben ser interpretadas adecuadamente para comprender la relación que tienen con la vida del sujeto.
Un aspecto muy importante a la hora de hacer esta interpretación es la situación orgánica del sujeto. Si el sujeto padece algún trastorno orgánico, éste se alegorizará consecuentemente. En estos casos, antes de realizar interpretaciones de tipo biográfico, es conveniente observar si existen estos trastornos, pues ellos pueden explicar las imágenes del sujeto.
Esquema básico de un sondeo transferencial
Durante la práctica transferencial, es el guía quien va orientando al sujeto.
1. Definir el interés.
2. Rélax completo guiado del sujeto.
3. Entrada en el mundo interno. El guía puede preguntarle al sujeto dónde está. También se puede comenzar por algún sueño, un dato biográfico o un ensueño significativos que haya tenido o tenga el sujeto.
4. El sujeto describe aquello que ve y sucede y el guía toma nota de todo. Esto incluye los comentarios del sujeto, así como cambios en la respiración, en la postura, momentos de silencio, etc.
5. El guía propone al sujeto descender al plano bajo.
6. El guía pide al sujeto que retorne al plano medio. El camino de regreso debe ser el mismo transitado en la bajada. El sujeto recorre ese plano.
7. El guía sugiere al sujeto ascender al plano alto.
8. El guía sugiere al sujeto retornar al plano medio.
9. El guía propone al sujeto salir de la transferencia. Esta salida debe ser suave, atendiendo a que el sujeto salga con un registro de calma interna.
Discusión vigílica
Después de la transferencia, el sujeto adquiere el rol de orientador del proceso, siendo el guía un ayudante que puede colaborar haciendo preguntas al sujeto, recordándole algún detalle de la transferencia que éste ha olvidado, ayudándolo a establecer relaciones, pero siempre cuidando de no introducir sus propios contenidos. Siempre es el sujeto quien decide y quien interpreta.
1. El sujeto escribe un resumen del sondeo con ayuda del guía.
2. El sujeto realiza un mapa del recorrido con ayuda del guía.
3. Agrupación alegórica. El sujeto describe por escrito, sintéticamente, los continentes, contenidos y conectivas. Este punto se amplía detallando atributos, niveles, momentos de proceso, texturas, colores, sonidos, olores, etc. También se interpretan las funciones con que cumplen algunos temas: defensores, protectores, intermediarios y centros de poder.
4. El sujeto anota posibles desintegraciones en el interior de las relaciones establecidas. Estas desintegraciones son imágenes de la transferencia que quedan, de alguna manera, "descolgadas" del relato general. Para definirlas es necesario apelar al registro.
5. El sujeto describe los climas y las resistencias encontradas. Si se han detectado tensiones corporales, también anotarlas. En las resistencias, destacar si se han superado, y anotar también aquellas que aparecen transformadas en distintas escenas, pero con un mismo origen.
6. El sujeto intenta establecer relaciones entre el significado de las imágenes y su propia vida. Este paso, de interpretación, es muy subjetivo. No hay que preocuparse por una interpretación equivocada, porque en días y prácticas posteriores, estas interpretaciones se van confirmando o descartando. Es importante atreverse a interpretar, para ir liberando ese canal. Para establecer estas relaciones es bueno apoyarse en los climas, asociar las imágenes con situaciones por los climas de éstas, no por su "aspecto".
7. Síntesis interpretativa. El sujeto realiza una breve síntesis final, tratando de plasmar, en pocas palabras, lo acontecido durante la transferencia. Se puede observar los argumentos, que son de 3 tipos: catárticos (el sujeto experimenta alivio de tensiones), transferenciales (el sujeto experimenta una transformación) y ocasionales (delatan tensiones o climas situacionales).
Elaboración post-transferencial
En los días siguientes a la práctica, el sujeto debe intentar anotar los sueños que vaya teniendo, así como otras imágenes o situaciones que puedan tener relación con la transferencia. Este periodo es vital, ya que el trasfondo de la práctica continúa actuando, y es importante aprovecharlo para continuar estableciendo relaciones. Su duración es variable, y no es recomendable realizar nuevas prácticas antes de haber cerrado este periodo.
Segunda etapa - transferencias profundas
Condiciones previas
Para poder encarar esta segunda etapa del proceso, el sujeto debe haber definido claramente el tema que desea trabajar.
El objetivo en esta etapa es la resolución del conflicto planteado.
¿En qué casos se apela a la transferencia profunda?
• Cuando interesa comprender mecanismos complejos de conciencia.
• Cuando se desea supera problemas biográficos que continúan presionando sin resolverse en la situación actual.
• Cuando se quiere provocar desplazamientos e integraciones de importancia.
¿En qué casos no se apela a la transferencia profunda?
• Cuando el sujeto muestra síntomas de anormalidad síquica.
• Cuando el sujeto considera al trabajo como un sistema terapéutico.
• Cuando el sujeto pretende resolver problemas que deberían estar superados por el ejercicio de prácticas anteriores.
• Cuando el sujeto se encuentra en la situación previa de resolver problemas catárticamente.
Definición de la técnica
Existen dos tipos de transferencias: de imágenes o de climas. Se utilizará un tipo u otro dependiendo del problema descrito por el sujeto:
• Si el sujeto experimenta un clima difuso, por ejemplo sensacion de que no puede hacer nada, sensación de que todo lo que haga le saldrá mal, sensación de un futuro tráfico, sensación de sin-sentido en la vida, sensación de encierro o falta de salida, en general depresión, temor, inseguridad, angustia, desazón profunda, etc., entonces se utilizará la transferencia de climas. Es importante observar si estos climas difusos no tienen como base una disfunción orgánica; en este caso, es importante realizar un chequeo médico y un tratamiento adecuado.
• Si el sujeto describe su problema claramente, en términos de situación, por ejemplo un clima asociado a un tema biográfico, una compulsión hacia objetos o situaciones, una fobia referida a objetos, una imagen obsesiva definida, entonces se utilizará la transferencia de imágenes.
Transferencia de imágenes
Las transferencias de imágenes operan básicamente con tres técnicas:
• Técnica de niveles: se efectúan recorridos por distintos niveles (bajo, medio y alto), lo que permite adoptar distintas perspectivas, distintos puntos de vista sobre el mismo conflicto. Este conflicto se representará de distinto modo en los distintos niveles, pero siempre será el mismo.
No todos los seres u objetos que aparecen en los espacios luminosos (altos) son luminosos, y lo mismo ocurre con los espacios oscuros (bajos).
• Técnica de transformismos: el sujeto va modificando los objetos o va modificando su propia imagen, de manera de ir modificando el clima asociado a esa imagen.
• Técnica de expansiones: el sujeto puede agrandar o empequeñecer a los objetos o a sí mismo, para vencer las resistencias que se le presentan.
En este tipo de transferencias, lo importante es detectar resistencias y vencerlas. Para su vencimiento, se utilizarán las tres técnicas descritas, cuya elección vendrá dada por la misma situación.
Se tiende a orientar al sujeto hacia la persuasión de los contenidos, hacia su transformación en lugar de la confrontación directa. Persuadirlos y lograr reconciliación interna. Si la resistencia es suficientemente fuerte, se retrocede y se vuelve a intentar en sucesivas prácticas.
Transferencia de climas
El objetivo de este tipo de transferencias es poder asociar un clima a una imagen. Una vez conseguido esto, se procede con las transferencias de imágenes.
1. El sujeto describe la sensación o clima difusos al guía.
2. Se intenta recuperar una situación donde el sujeto ha sentido ese clima con fuerza. No se busca la causa del clima, sino una situación que nos permita obtener el registro. El objetivo es desbloquear los climas fijados, no comprender sus causas. Aun así, será interesante si se detecta una situación biográfica lo más antigua posible.
3. El sujeto describe esa situación. Si se ha logrado el encaje suficiente entre clima e imágenes, se puede continuar con el trabajo de transferencia de imágenes. Si no se ha logrado, se continúa en sesiones sucesivas con la transferencia de climas, hasta conseguirlo.
Elaboración post-transferencial
Igual a la del sondeo transferencial, sumándole además la observación de la conducta por parte del sujeto, con el objetivo de detectar los indicadores de cambio.
Asimismo, los sueños, imágenes, cambios de punto de vista, etc., que puedan ir apareciendo en el sujeto también serán indicadores de la transferencia producida.
Si no se produce esta reelaboración, no ha habido transferencia.
Resumen
1. Manejo del rélax y de algunas experiencias guiadas.
2. Definición del interés del trabajo.
3. Elección de una pareja y un ámbito adecuado de trabajo.
4. Prácticas de Catarsis.
5. Prácticas de Sondeo Transferencial.
6. Transferencias profundas.
Bibliografía
• Autoliberación (L.A. Ammann).
• Psicología I, II y III. Obras Completas volumen 2 (Silo).
• Libro de Escuela (Silo). Canarias, 1976:
• Teoría de las transferencias.
• Formas de trabajo: Rélax, Catarsis, Transferencias.
• Consecuencias de los estudios y trabajos de Operativa.
• Charla sobre transformaciones de impulsos (transferencias) (Silo). Corfú, 6 de septiembre de 1975.
.