Para todo sistema intrínsecamente violento, toda violencia es funcional a su conservación.
Para ello, al sistema le sirve manipularnos y dividirnos en bandos antagónicos para seguir manteniéndose.
La ilusión de los bandos antagónicos implica violencia interna.
La violencia interna es precursora de la violencia externa, por acción u omisión.
Alimentar la ilusión de los bandos antagónicos es contribuir a mantener el sistema.
Resistir la ilusión de los bandos antagónicos es contribuir a desarmar el sistema.
Porque somos intencionales y no dialécticos, no luchamos contra personas o grupos de ellas, ni adherimos por defecto e incondicionalmente a sus adversarios.
Luchamos por y para el cambio de sistema; es decir, creencias, de valoraciones, de prácticas, de condiciones, etc. que mantienen el sistema.
Si bien practicamos la resistencia justa contra toda forma de violencia, aspiramos igualmente a integrar, “aspiramos a persuadir y a reconciliar”.
“El buen conocimiento lleva a la reconciliación”.(41)
Por lo tanto, y por la estructuralidad antes señalada, no cabe la identificación personalizada del “enemigo” o “culpable”, ni la violencia interna o externa que acompaña a tal identificación.
Ser “responsable” no es lo mismo que ser “culpable”, y esta distinción no es simplemente semántica e irrelevante, ya que están en juego la concepción del papel que juegan los individuos dentro de un sistema violento, y las consecuencias violentas o no violentas que se derivan de dicha concepción.
Espero que todo lo anterior tenga el valor que tuvo para mí el escribirlo, que nos sea de ayuda para experimentar el fracaso de la lógica violenta, triunfalista y vindicativa de los bandos y aspirar a salir del círculo cerrado de tolerar más violencia con la falsa esperanza de acabar con la violencia.
En última instancia dependerá del Sentido trascendente que se le dé o no a la vida, propia y ajena. A tal propósito, es posible derivar de este escrito algunos trabajos de reflexión, individual y/o conjunta, en forma de talleres o retiros breves.
Es posible, necesario y deseable luchar por el cambio social con la metodología de la no violencia activa.
Es posible, necesario y deseable hacerlo desde una actitud no violenta. Para esto habrá que aprender a resistir la violencia no sólo fuera de nosotros, sino simultáneamente dentro de nosotros.
La convergencia de la diversidad es el camino hacia la nación humana universal, y la ilusión de los bandos es un serio obstáculo en ese camino.
Ese mundo humanizado y no violento al que aspiramos estará más a nuestro alcance si también comienza a nacer en nuestro interior.
Una manera de hacerlo es rompiendo la ilusión de los bandos, de la actitud dialéctica en términos de “enemigos” y “culpables”, elevando la visión y la motivación hacia fuentes más suprapersonales de la sabiduría, la bondad y la fuerza interna que son indispensables para este gran cambio en ciernes.
“Los hombres preocupados por los problemas de fondo, no deben engañarse con las luchas periféricas entre ideologías o sistemas políticos. Está planteada una lucha más profunda y total entre la zona oscura y destructiva del hombre y su zona de luz, entre el sueño y el despertar, entre la regresión y la evolución. La verdadera lucha del hombre está en su conciencia, importa pues despertarla.”(42)
Fernando A. García
Buenos Aires, marzo de 2014.
41 Silo. El Mensaje de Silo. La Experiencia. Reconocimiento.
42. Silo y la liberación. Conferencia: Vigilia, conciencia de sí y conciencia objetiva, Buenos Aires, 24 de Agosto de 1969
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Bibliografía
Silo y la liberación. H. Van Doren. Editorial Transmutación. Mendoza, setiembre de 1970
Libro de Escuela (Canarias 1976). Trabajo de equipo.
Silo – “El mundo se acelera” - Agosto-septiembre 1992. Punta de Vacas y zonas aledañas. Vídeo y transcripción del audio del vídeo.
Silo – Obras Completas. Vol. I. Plaza y Valdés Editores. Buenos Aires, octubre de 2004.
Silo – El Mensaje de Silo. Ulrica Ediciones, Rosario, noviembre de 2007.
Silo – Charla sobre la venganza, la reconciliación y sus fundamentos con un grupo de estudios. Grotte (Italia), 6 de mayo de 2008. Transcripción de grabación de audio.
El Libro de La Comunidad, La Comunidad (para el desarrollo humano), Septiembre de 2009. Trabajo de equipo.
García, Fernando A. “Terminología de Escuela Encuadre y Vocabulario. Edición 2013”, Centro de Estudios, Parques de Estudio y Reflexión Punta de Vacas, octubre de 2013.
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Anexo (43)
11° El Principio de negación de los opuestos.
"No importa en qué bando te hayan puesto los acontecimientos; lo que importa es que comprendas que tú no has elegido ningún bando". Aquí no se explica que haya que abandonar todo bando.
Aquí se sugiere considerar la posición en que uno se encuentra, como resultado de factores ajenos a la propia elección; factores educacionales, de ambiente, etc.
Tal actitud hace retroceder el fanatismo, al tiempo que permite comprender los bandos y las posiciones que asumen otras personas.
Evidentemente, esta forma de considerar el problema de los bandos contribuye a la libertad de la mente y tiende un puente fraterno hacia las demás personas aún cuanto éstas no coincidan con mis ideas, o aparentemente se opongan a mis ideas.
Este Principio, al tiempo que reconoce la falta de libertad en las situaciones que uno no ha construido, afirma la libertad de negar las oposiciones si son parte de las mismas situaciones.
En otras palabras: yo no he decidido ser alto o bajo, gordo o delgado y si esa condición está acompañada de oposiciones a otros que tampoco eligieron su bando, tengo libertad para negar esa oposición.
Yo no inventé a los altos, a los bajos, a los gordos o a los delgados, por tanto niego toda oposición responsable. Veamos sobre esto, una antigua enseñanza:
Los enemigos de Jesús decidieron ponerlo en dificultades presentándole dos posibilidades, de tal modo que eligiendo una, quedara en mala posición frente a la otra. Se acercaron a él y dijeron:
"Maestro, sabemos que eres amador de la verdad, y que enseñas con verdad el camino de Dios y que no te inclinas por nadie, ya que no tienes acepción de persona de hombres. Dinos pues, ¿qué te parece?, ¿es lícito dar tributo a César o el tributo debe ser para el culto religioso?".
Mas Jesús, entendida la malicia de ellos, les dijo: "¿Por qué me tentáis, hipócritas? Mostradme la moneda del tributo".
Y ellos le presentaron un denario. Entonces les dijo: "¿De quién es esta figura?" Díjole: "De César".
Y díjoles: "Pagad pues a César lo que es de César y a Dios lo que es de Dios". Oyendo esto, sus enemigos se confundieron y dejándole, se fueron.
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43. El Libro de La Comunidad, La Comunidad (para el desarrollo humano), Septiembre de 2009. Capítulo III. Temas Formativos. F. Temas sobre la Acción Válida
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Extraído de: Diversidad y Bandos - Fernando A. García
(Reflexiones sobre el Principio de la negación de los opuestos)
http://fernandoagarcia.blogspot.com.ar/search/label/REFLEXIONES
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Blog de Fernando García - http://fernandoagarcia.blogspot.com.ar/
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