Las personas que están mal internamente nos tiran para abajo con su influencia.
La influencia negativa se contrarresta afirmándose internamente en lo positivo,
La influencia negativa se contrarresta afirmándose internamente en lo positivo,
apoyándose internamente en las certezas internas.
Hay que hacerle vació a lo negativo que se presenta. Hay que tener reflejos rápidos para eso.
Apenas aparece el choque negativo hay que actuar, sino te arrastra para abajo.
Si alguien se cree superior a otros el mejor favor que se le puede hacer
es llevarlo de visita guiada al cementerio más cercano.
No existe el ser humano y humana superior a otros, todos somos lo mismo.
Quien se muestra superior a otros y otras es porque se cree inferior.
Y si lo que muestra en ostentación es algo externo a el mismo o a ella misma,
muy poca cosa se debe creer.
Si, evidentemente necesita ayuda.
Si podes brindársela, bien. Nada más.
Si le sirve, mejor. Si no le sirve, es su elección.
En la vida estamos condenados a elegir, en cada momento,
a cada instante elegimos la dirección de nuestros actos.
Nuestro estado interno no puede depender de lo que los demás hagan.
No somos piedras. Lo que los demás hacen nos afecta;
más la respuesta externa e interna que demos es nuestra responsabilidad.
Hay que hacerse responsables de los estados internos en los cuales transitamos,
y si caemos en estados negativos, tenemos la responsabilidad de salir de ellos lo antes posible,
por nosotros mismos y por la gente que nos rodea.
.
Hay que hacerle vació a lo negativo que se presenta. Hay que tener reflejos rápidos para eso.
Apenas aparece el choque negativo hay que actuar, sino te arrastra para abajo.
Si alguien se cree superior a otros el mejor favor que se le puede hacer
es llevarlo de visita guiada al cementerio más cercano.
No existe el ser humano y humana superior a otros, todos somos lo mismo.
Quien se muestra superior a otros y otras es porque se cree inferior.
Y si lo que muestra en ostentación es algo externo a el mismo o a ella misma,
muy poca cosa se debe creer.
Si, evidentemente necesita ayuda.
Si podes brindársela, bien. Nada más.
Si le sirve, mejor. Si no le sirve, es su elección.
En la vida estamos condenados a elegir, en cada momento,
a cada instante elegimos la dirección de nuestros actos.
Nuestro estado interno no puede depender de lo que los demás hagan.
No somos piedras. Lo que los demás hacen nos afecta;
más la respuesta externa e interna que demos es nuestra responsabilidad.
Hay que hacerse responsables de los estados internos en los cuales transitamos,
y si caemos en estados negativos, tenemos la responsabilidad de salir de ellos lo antes posible,
por nosotros mismos y por la gente que nos rodea.
.