lunes, 2 de diciembre de 2013

Experiencias y Creencias - Omar Paladini y Amig@s


Un Amigo dijo: Espiritualidad si, estupidez no...

Omar¿Como diferenciarlas? Difícil, difícil.

Amigo: Para nada!!! todo pasa por la experiencia.

OmarSí, concuerdo, la experiencia es esencial. El resto son especulaciones que uno hace. Referencias de maestros que suenan como creíbles, y guían hasta que uno puede corroborar con la propia experiencia.

 La experiencia a su vez es interpretada de acuerdo al marco de creencias que uno tiene en un momento dado. 

Ejemplo: una experiencia interna X de una persona religiosa (cristiana, islámica, judía, etc.) podrá ser interpretada como un mensaje de su Dios, y para una persona atea una señal de que debe consultar a un psiquiatra. 

Las creencias (como formas) moldean los contenidos de conciencia (como un liquido toma la forma del recipiente o la botella en que es contenido.

Otro amigo comento: En mi opinión lo fundamental es no confundir experiencia con anécdota.

Omar:  Experiencias accidentales quizás la mayoría de las personas tenemos, como bien decís: anécdotas (que no dejan de ser experiencias).

Y experiencia, en el sentido que lo dirían maestros de distintas escuelas místicas,
de autoconocimiento y superación, escuelas psicológicas ( por ejemplos: Carl Gustav Jung con su escuela de psicología analítica -también llamada psicología de los complejos y psicología profunda-, o Abraham Maslow uno de los fundadores y principales exponentes de la psicología humanista, y pionero de la psicología transpersonal, que desarrollo el concepto de "Experiencia Cumbre"),
 
experiencia dicha en el sentido de estas ultimas lineas de trabajo, ya es otra cosa. Ahí ya estamos hablando de un trabajo intencional sostenido en el tiempo, que si da frutos permite "manejo" por parte del sujeto para entrar y salir de una determinada experiencia.

 Ejemplo 1. Experiencia "Espectacular" (llamemosla mística en relación al buddhismo Zen): Desconexión Intelectual Total Accidental Sígnica y Simbólica, sin intención del sujeto para que esto se produzca, solo atención, silencio mental total.

Ejemplo 2:
Ejercicio intencional cotidiano de entrada en el silencio mental y salida (duración de la experiencia 15 segundos, y 15 segundos más de reacomadamiento con soltada de tensiones musculares, respiración equilibrada y distensa, y equilibrio psicofísico como experiencia inmediata.

A primera vista la primer experiencia puede parecer más llamativa.

Hay algunos puntos negativos: 1. Fue accidental. 2. No hay forma de repetirla. 3. Seria peligrosa para el sujeto si se mantiene en el tiempo y no pudiera volver al funcionamiento habitual de su conciencia -seria consciente de todo lo que experimenta no traducible a palabras, conceptos, símbolos, imágenes, y no podría comunicarse ni con los demás, ni consigo mismo, ya que las elaboraciones intelectuales están en suspenso-.

La segunda experiencia, si bien vista desde afuera puede parecer menos llamativa, tiene algunos puntos a favor: 1. Fue intencional, querida y llevada adelante por el sujeto. 2. Repetible a voluntad. 3. Con efectos benéficos posteriores inmediatos para el sujeto.

 Con este tipo de experiencias, ocurre algo similar que en la utilización del uso de drogas para entrar en determinados estados internos.

En el uso de drogas no hay "manejo" por parte del sujeto del estado en que se encuentra.


Con el agravante de que muchas de ellas producen perjuicios psicofísicos.

El otro agravante es que con el tiempo hay menos energía disponible, y se necesita más cantidad de droga para producir los mismos efectos.

En el caso del trabajo sobre si cotidiano ocurre lo inverso, a mayor practica hay más manejo (el termino manejo puede llevar a equívocos: es un manejo "suelto" -no tenso-), hay mayor caudal energético disponible, y mejores experiencias.

Una Amiga dijo: Espiritualidad, sí. Sentido común, también.

OmarNo hay nada más alejado al sentido común que estos temas y estas practicas.

Buddha tuvo años de practicas y meditación para lograr los resultados que intuía podía lograr.


Bodhidharma, el primer patriarca legendario y fundador del budismo Zen en China, estuvo en una cueva meditando mirando la roca de una pared durante nueve años.

¿Que tiene de sentido común eso? Más bien parece locura. O quizás es un sentido no-común, que te dice:

"Esto que yo experimento no me satisface. La vida tiene que ser otra cosa".

Y el sujeto sale en búsqueda sincera de esa otra vida, que en alguna parte intuye que estará, quizás muy cerca, en su propia interioridad. 


 Viaje largo a veces, como Ulises en su retorno a Ítaca. 

Actitud heroica del que se juega la vida para llegar a destino. 

Flecha lanzada como acto hacia el futuro. Destino de humanidad.

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Texto extraído de una charla entre Omar Paladini y Amig@s 
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